Dominio privado al comenzar operaciones comerciales

Arquitectura webCategoría
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Ángel Torres Tagle

Descubre las ventajas inigualables de obtener un dominio privado para echar a andar tu negocio en la red y aprovecha los recursos digitales a tu alcance.

Después de pasar quizás cientos de horas buscando la perfecta identidad para tu marca llegará inevitablemente el momento en que debes de comprar el nombre de dominio para tu página web. Esto es en sí un proceso muy sencillo, inclusive de algunos minutos de duración, que marca el inicio de las operaciones de tu marca en línea. Sin embargo, dentro de este proceso hay un punto muy importante que debes considerar y que es totalmente opcional: adquirir la opción de un dominio privado.

¿Qué implica un dominio privado?

Antes de decidir cualquier compra de dominio te recomiendo tomar algunos minutos para pensar y decidir de la manera más objetiva posible si te puedes beneficiar de la compra de un dominio privado con algunos sencillos puntos:

Todo dominio tiene un dueño

Comprar un dominio implica, indirectamente, registrarlo ante la ICANN a través de un vendedor dominios y acreditar que tú eres el dueño legítimo de este sitio. Por esta razón te pedirán información personal –nombre, teléfono y correo electrónico– para que, en caso de que alguien tenga algún tema relacionado con ese dominio, puedan contactarte.

Normalmente deberás proporcionar información para tres diferentes puntos al registrar un dominio:

  • El contacto de la persona que está haciendo el registro
  • Aquel que puede ser buscado para asuntos administrativos
  • Alguna otra persona para referencias en cuestión técnica

Tu información es visible

Una vez que entregas esta información, esta puede ser consultada sin problemas por cualquiera a través de la herramienta WhoIs, disponible en el propio sitio de la ICANN y otros servicios de registro de dominio.

Este es una especie de buscador que permite revelar los datos de contacto de prácticamente cualquier dominio que exista. Aquí es donde los focos rojos podrían encenderse. ¿Qué tan importante es que tu nombre y datos de contacto estén ocultos de los ojos de prácticamente todos los presentes en internet?

Riesgos y peligros de tener tu información accesible para todos

Robo de identidad. Quizás uno de los puntos más delicados es que cualquier persona, incluso aquellas con pésimas intenciones, podría hacer uso de estos datos para su beneficio. Al final de cuentas son datos legítimos que estás dando para poder tener un dominio y podrían usarse para la compra de otros sin tu conocimiento.

El bendito spam. Todos lo conocemos, borramos y odiamos. Recibir correos no deseados es una tarea rutinaria del día a día en cualquier negocio, pero no por eso debes mostrar tu dirección a todo el mundo. Cientos de compañías, incluyendo estafadores en línea, navegan a través de las bases de datos de WhoIs para obtener correos de contacto a los que pueden bombardear con mensajes falsos y, en algunos casos, fraudulentos con prácticas de phishing para robar tu información personal.

Un dominio privado para tu tranquilidad en línea. Afortunadamente todos los puntos anteriores son resueltos a través de lo que se le conoce como el registro de un dominio privado. Esta opción, que te es otorgada cuando estás haciendo el proceso de compra y que normalmente puede llegar a duplicar el costo del dominio, protege tu información poniendo en la sección de contacto del directorio de WHOIS a una empresa Proxy, ocultando tu identidad de consultas no deseadas mientras tú conservas la propiedad del dominio en su totalidad.

Consideraciones importantes

Te recomiendo leer cuidadosamente todas las letras pequeñas a la hora de contratar este servicio para que sepas qué sí y qué no estás delegando. Hay compañías que abusan de este proceso para poder registrarse no sólo en la parte de contacto, sino como dueños del propio dominio.

Ten cuidado y en caso de que tengas cualquier duda marca o contacta a la compañía con la que estás haciendo el registro para asegurarte que el proceso es totalmente transparente.

Si tu negocio es pequeño, y principalmente si basas tu operación en casa, probablemente sea una terrible idea tener tus datos de contacto al alcance de todos. Si tu empresa tiene ya un poco de camino recorrido es probable que no te moleste que los diferentes puntos de contacto que registras sean los teléfonos, correos y empleados designados por ti. Podrían ser oportunidades de negocio por abrirse para que alguien entre en contacto para negociar algún tipo de alianza comercial o simplemente para ofrecer algún servicio.

A final de cuentas, decidir qué hacer queda a tu criterio. Mantener la privacidad de tus datos en línea va más allá de las redes sociales y cuentas de correo electrónico cuando hablamos de algo tan delicado como un dominio propio. Piensa de qué manera podría o no afectarte a corto y largo plazo y si es una inversión que podría esperar.